Cerramos la serie hablando de los sistemas aplicados con soplete.
Para las instalaciones de betún modificado de fácil manejo, las membranas de recubrimiento autoadhesivas y aplicadas con soplete son las opciones más claras. Como todas las membranas de betún modificado, son fuertes, duraderas, increíblemente resistentes a la intemperie, fáciles de mantener y asequibles, sin necesidad de adhesivos de proceso en frío sucios y apestosos ni de hervidores de asfalto caliente maloliente.
Como se destacó en la Parte 2 de esta serie, los equipos aprecian los sistemas autoadhesivos por su instalación rápida, limpia y sin soplete. Pero las membranas aplicadas con soplete son la opción clásica por su excelente rendimiento y durabilidad a largo plazo, y son la solución ideal en muchas circunstancias.
Como su nombre indica, se instalan utilizando sopletes alimentados con propano, generalmente un soplete manual para techos para el tapajuntas y un carro soplete rodante para la membrana de campo. El soldador funde el compuesto asfáltico de revestimiento, convirtiéndolo en un líquido que, al enfriarse, forma una unión con el sustrato.
Las membranas aplicadas con soplete suelen costar menos que los sistemas autoadhesivos, y como las membranas se adhieren utilizando técnicas tradicionales de techado con soplete, las uniones pueden completarse junto con la membrana de campo, lo que acelera la instalación. Sin embargo, la técnica requiere unos conocimientos y una delicadeza que sólo se adquieren con la capacitación y la experiencia, por lo que debe dejarse en manos de equipos profesionales.
Cualquier instalación de techo aplicado con soplete conlleva un riesgo inherente de incendio, por lo que siempre deben tomarse las precauciones adecuadas para proteger a las personas y los bienes. Pero hay muchos trabajos en los que el riesgo de incendio es pequeño y un sistema aplicado con soplete es una opción extremadamente segura. Por ejemplo, un edificio nuevo en construcción con cubierta metálica o de concreto; el edificio está desocupado y el no haber materiales combustibles hace que la posibilidad de que se inicie un incendio sea mínima.
Los sistemas aplicados con soplete también son mucho más tolerantes con las bajas temperaturas durante la instalación que sus primos autoadhesivos, lo que los convierte en la solución más adecuada cuando se trabaja en climas más fríos. Para asegurar una fuerte adhesión de la membrana y uniones soldadas de calidad cuando se instalan sistemas aplicados con soplete, se debe tener especial cuidado a temperaturas ambiente de 40ºF a 45ºF e inferiores, y cuando las temperaturas ambiente se ven afectadas por el viento o la humedad. Y los rollos de membrana deben estar a una temperatura mínima de 60ºF en el momento de la aplicación, por lo que se recomienda disponer de una zona de almacenamiento con calefacción en el lugar durante los trabajos en climas fríos.
Con más de 40 años de rendimiento demostrado sobre el terreno, los sistemas de betún modificado son los caballos de batalla de los techos de pendiente baja. Y mezclando y combinando la formulación de la membrana de recubrimiento y el método de fijación en función del clima, la experiencia del personal, la normativa local y otras condiciones específicas del proyecto, se puede crear un sistema que se adapte prácticamente a cualquier edificio comercial.
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